Y llegaron las fiestas patrias. Aunque este año será distinto. No podré tomar todo el vinito que me tomaba cada vez que celebraba la independencia de mi país.
El vino es algo que extraño demasiado. Se me hace agua la boca cada vez que estamos en un asado y la gente saborea su copa. Sin embargo prometí no tomar ni una sola gota de alcohol durante todo mi embarazo, y aunque hay gente que me dice que una copita no le hará daño a mi hija, yo me opongo rotundamente. Y eso sí ha sido un gran sacrificio porque me fascina el vino y la cerveza.
Este fin de semana viajaremos a la casa de mis padres las tres, mi novia, Julieta y yo. Vamos a disfrutar de la rica comida chilena, los anticuchos, las empanadas, el pebre, y los asados!!! Tendré cuidado de no comer mucho pues ayer en mi control de embarazo el doctor me dijo que había subido dos kilos el último mes y que el solo me permitía 1 kilo por mes, oops!
Ay Caro yo también muero por una copita de vino! Acá también andamos festejando las fiestas patrias pero tampoco probaré ni una gota de alcohol jejeje.
ResponderEliminarDe todos modos igual me he divertido estos días.
Viva Chile y viva México!!!